Las dinámicas sociales y familiares propias de esa época festiva modifican las rutinas de convivencia, lo cual genera escenarios de descuido, aislamiento y falta de acompañamiento para quienes requieren una mayor atención, añaden estudiosos del Programa Persona Adulta Mayor de la Universidad Estatal a Distancia.
Este fenómeno está vinculado a factores sociales, económicos y culturales que se acentúan durante las vacaciones, agregó Melissa Sánchez Salas, coordinadora de ese estudio de la Vicerrectoría de Extensión y Vinculación Territorial del alto centro de estudios, publica la televisora.
«La presión económica –amplía la analista- también repercute en la atención: los gastos en regalos, viajes y celebraciones hacen que algunas familias prioricen otros aspectos y descuiden necesidades básicas de las personas mayores, como medicinas, transporte y acompañamiento”.
De acuerdo con la experta, las formas de negligencia, maltrato y exclusión aumentan en las referidas fechas, lo que constituye una alerta nacional sobre la situación de abandono que enfrenta esta parte de la población.
“Desde el Programa –expresó Sánchez- llamamos a la sensibilidad, trato humano, digno y respetuoso para quienes requieren de nuestro apoyo y compañía, no solo en época navideña, sino también durante todo el año”.
La especialista aseguró que durante ese lapso de festividades de fin de año, instituciones públicas, hogares de larga estancia y organizaciones comunitarias refuerzan sus estrategias para atender la creciente demanda.
Dichas acciones –explicó- comprenden aumentos de especialistas, evaluaciones de riesgo sobre la gravedad de los casos, guardias de fin de semana y feriados, habilitación de espacios adicionales y coordinación con entes municipales, cuerpos policiales, centros de salud, y el Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor.
“Muchos costarricenses –lamentó, la directora ejecutiva de dicha institución, Yolanda Benavides- perdimos la pertenencia, el amor y el cuido por nuestros adultos mayores, aunque el abandono o la negligencia si uno de ellos fallece es castigado con hasta con 10 años de cárcel”.
ro/apb





