Las agresiones armadas registradas en las provincias de Banteay Meanchey, Oddar Meanchey y Preah Vihear, también obligaron a decenas de miles de residentes a huir de sus hogares, mientras continúan las operaciones de evacuación en medio de crecientes hostilidades, añadió Pheaktra citado por el diario Khmer Times.
De acuerdo con la propia publicación, las imágenes de la cámara de seguridad de la Administración Provincial de Banteay Meanchey captaron tanques tailandeses y fuerzas paramilitares cruzando el alambre de púas en la frontera y entrando en la aldea de Prey Chan esta tarde.
Por su parte, el presidente del Senado camboyano, Hun Sen, manifestó su pesar por la decisión del primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, quien anunció a través de las redes sociales el cierre de las vías de negociación en torno al nuevo conflicto fronterizo.
“Nunca imaginé que el primer ministro tailandés, Anutin, tomaría semejante decisión. Solo por futuras votaciones se atrevería a poner en peligro la vida de soldados y civiles al declarar la guerra a Camboya, incluso cuando las fuerzas armadas camboyanas no respondieron”, escribió Hun Sen.
El ex jefe de Gobierno camboyano recordó que Anutin fue amigo suyo antes de asumir el cargo, “pero al convertirse en Primer Ministro olvidó su amistad”, escribió en las redes sociales y añadió que “entendemos el patriotismo, pero no se debe declarar la guerra a quienes no se defienden”.
Mientras, el titular del Ejecutivo camboyano, Hun Manet, describió esta tarde las principales tareas del Gobierno Real en respuesta a los agresivos ataques de las fuerzas tailandesas.
Las prioridades más importantes e inmediatas del gobierno son proteger a la población y salvaguardar la integridad territorial bajo la soberanía de Camboya, puntualizó Manet, quien de acuerdo con el diario Khmer Times instó también a “mantenerse unidos por la causa de la nación durante este difícil período”.
En un comunicado emitido hoy la Asamblea Nacional de Camboya condenó “inequívoca y enfáticamente” a Tailandia, acusándola por los “actos agresivos” que violan la soberanía y la integridad territorial del Reino, lanzados por sus fuerzas armadas los días 7 y 8 de diciembre.
Según la declaración del Legislativo, zonas de las provincias de Preah Vihear, Banteay Meanchey y Oddar Meanchey fueron atacadas por aviones de combate F-16 tailandeses, artillería pesada y con gases tóxicos, lo que provocó muertes y lesiones entre la población civil, así como una destrucción generalizada de bienes.
Al respecto, la Asamblea Nacional declaró que estas acciones constituían no solo una grave violación de la Declaración Conjunta sobre el Acuerdo de Paz entre Camboya y Tailandia suscrito el 26 de octubre último, sino también amenazan la estabilidad en la subregión del Mekong y la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático.
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