En un comunicado de la legación diplomática de Managua, que encabeza Carlos Midence, se resalta la participación en la festividad de los embajadores de Costa Rica, Bernardina Vargas; de Colombia, Fabio Mariño; y de Honduras, Candelario Reyes.
También asistieron representantes de Indonesia, China y autoridades del Gobierno Local y la Universidad Tecnológica de Panamá, quienes a junto a residentes nicaragüenses en el istmo se regocijaron con los cantos tradicionales a la virgen.
La acostumbrada “gorra”, contó con la colaboración de emprendedores nicas y permitió la distribución de regalos, golosinas y bebidas típicas.
El embajador Midence saludó a los asistentes en nombre de su Gobierno, al tiempo que comentó sobre los orígenes de esta original celebración.
Resaltó la creatividad y devoción de los altares en honor a La Purísima, en animada ceremonia también conocida como La Gritería, en la que los participantes comparten cánticos al ritmo de palmas para rendir tributo a la virgen.
Como explicó Midence, La Purísima no es solo un acto de devoción mariana; es una ocasión especial donde se renueva el sentido de comunidad, la memoria histórica y el fervor de su pueblo.
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