En la audiencia de este martes, en la Corte Nacional de Justicia en Quito, el juez Olavo Hernández decidió que otras personas deberían ser juzgadas como autores directos o cómplices del delito de cohecho. Entre los acusados están familiares del exgobernante como su esposa, Rocío González; su hija, Irina Moreno; sus hermanos, Edwin y Guillermo; y Martha González, cuñada.

A ellos se suman, el empresario Conto Patiño, amigo del expresidente y exrepresentante de Sinohydro en Ecuador, y varios de sus parientes.

Según la teoría de la Fiscalía, la empresa china Sinohydro pagó sobornos a cambio de que la firma fuera designada para la construcción de la hidroeléctrica Coca Codo Sinclair.

El presunto cohecho se habría cometido entre 2010 y 2018, cuando Lenín Moreno era vicepresidente de Rafael Correa.

Según la Fiscalía, Moreno habría ayudado a su amigo, Conto Patiño, a conseguir el contrato y, a cambio, ambos y sus familias habrían recibido pagos irregulares.

La semana pasada, el exmandatario se pronunció sobre el caso y señaló que el proceso penal en su contra por presuntos sobornos recibidos cuando era vicepresidente del entonces jefe de Estado Rafael Correa, es una “venganza” del correísmo por haberse rebelado luego, cuando llegó al poder.

No obstante, el magistrado Hernández consideró que la Fiscalía presentó evidencias sólidas, como informes periciales, que permiten presumir que Moreno recibió dádivas para influir en la firma del contrato con la empresa Sinohydro.

“Moreno es corrupto, traidor y el principal destructor de mi Patria”, afirmó Correa en sus redes sociales.

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