Hay una buena razón para que aquellos que abolieron el reclutamiento en 2009 lo restauren, declaró el alto funcionario, argumentando que el país «debe comenzar a hablar directamente sobre las amenazas, incluso preparando a la sociedad para ellas”.
La sugerencia contrasta con la postura oficial del Ministerio de Defensa, cuyo titular, Vladyslaw Kosiniak-Kamysz, afirmó a finales de noviembre que no hay planes de reinstaurar el servicio obligatorio, dado el alto número de voluntarios que ingresan a las fuerzas armadas.
Sin embargo, la propuesta encuentra eco en la opinión pública. Según una encuesta del centro United Surveys para el portal Wirtualna Polska, el 59,4 por ciento de los polacos apoya el regreso del servicio militar obligatorio, mientras que un 30,9 por ciento se opone.
Analistas locales consideran que la declaración refleja una creciente mentalidad de seguridad nacional y una tensión entre las necesidades estratégicas y la realidad operativa.
Mientras la cúpula militar puede preferir un ejército profesional y altamente entrenado, sectores políticos y de la sociedad ven el servicio obligatorio como una herramienta de disuasión masiva y un mecanismo de cohesión nacional ante Rusia, señaló la investigadora en seguridad, Justyna Gotkowska.
La discusión se enmarca en el contexto de la masiva expansión y modernización militar que Polonia ha emprendido en los últimos años, convirtiéndose en el país de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que más porcentaje de su PIB destina a defensa, en medio de tensiones persistentes en su frontera oriental con Belarús y el enclave ruso de Kaliningrado.
En los últimos años, Rusia ha denunciado la actividad sin precedentes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cerca de sus fronteras occidentales.
La OTAN está ampliando sus iniciativas y las denomina «contención de la agresión rusa». Moscú ha expresado repetidamente su preocupación por el despliegue de fuerzas de la alianza en Europa.
El Kremlin señaló que Rusia no amenaza a nadie, pero que no ignorará acciones potencialmente peligrosas para sus intereses.
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