Mediante su cuenta en X, el funcionario compartió imágenes de privados de libertad en el centro penitenciario, cuya construcción aún no ha sido concluida y no han permitido la visita de organizaciones de derechos humanos ni de la prensa.
La cárcel, ubicada en la provincia costera de Santa Elena, tiene una capacidad para 800 reos y, de acuerdo con las informaciones divulgadas, ya está ocupada por al menos 640 internos, es decir, ya está al 80 por ciento de su aforo.
Los traslados iniciaron el 10 de noviembre de este año, en el contexto de la campaña previa a una consulta popular y referéndum de interés del Ejecutivo, y el mismo presidente de la República, Daniel Noboa, indicó que la infraestructura estaba entre un 35 y un 40 por ciento.
Anteriormente, Reimberg mencionó que ya fueron movilizados hacia ese penal miembros de las organizaciones criminales Los Choneros, Los Lobos y Sao Box y, además, entre los internos está el exvicepresidente Jorge Glas, algo que analistas y la oposición consideraron como un show político.
Ante las denuncias de violaciones de derechos y tratos crueles en esa prisión, organizaciones de familiares de privados de libertad comparan ese lugar como un campo de concentración nazi.
Las autoridades aseguran que el centro opera bajo estrictas medidas de control y vigilancia, y que su puesta en marcha busca reducir la crisis de seguridad y el hacinamientos que ha afectado al sistema penitenciario ecuatoriano en los últimos años.
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