Foto: Presidencia del Congo
El embajador Antoine Ghonda Mangalibi indicó que era necesario informar al mandatario congoleño, en su calidad de figura de mayor rango en la región, sobre los últimos acontecimientos en el este de la RDC tras los acuerdos de Washington, Estados Unidos, rubricados el 4 de diciembre.
En declaraciones tras el encuentro ocurrido la víspera, Ghonda Mangalibi subrayó la importancia que le concede su país a que el decano del área comprenda la situación, brinde orientación y asesoramiento para el seguimiento.
“Inmediatamente después de la firma de estos acuerdos en Washington, la rebelión de la Alianza del Río Congo-Movimiento 23 de Marzo (AFC/M23) reanudó las hostilidades con el apoyo de Ruanda. Por lo tanto, era crucial expresar nuestra indignación”, comentó el enviado.
La ciudad de Uvira, considerada estratégica para el aparato de seguridad del gobierno congoleño en la provincia de Kivu Sur, quedó en manos de la AFC/M23 el pasado 10 de diciembre, reforzando la influencia de los rebeldes en las provincias de Kivu Norte y Kivu Sur.
Analistas consideran que esta es una ubicación clave que podría abrir camino hacia la región del Gran Katanga, considerada el corazón económico del país.
La presión internacional provocó que los insurgentes anunciaran una retirada de la ciudad, pero las Fuerzas Armadas de la RDC denunciaron que lo que ha ocurrido desde entonces no es una salida real y efectiva, sino un repliegue táctico hacia otras zonas del área.
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