Señaló que casi el 30 por ciento de los 1,5 millones de personas que acuden a los más de 970 comedores sociales en Alemania son niños, mientras que cerca de 20 por ciento son mayores de 63 años.
Dijo que en comparación con el año anterior, el número de niños aumentó ligeramente, lo que les preocupa.
La entrega de comida en los bancos de alimentos es gratuita o se realiza a cambio de una pequeña contribución. Su situación sigue siendo tensa, según Steppuhn.
Añadió un tercio de todos los bancos de alimentos sigue teniendo listas de espera o dejaron de admitir nuevos usuarios.
En el año que está a punto de terminar, los bancos de alimentos alemanes rescataron unas 265 mil toneladas de alimentos. Ello supone 500 kilogramos de alimentos por minuto.
Equivale, por ejemplo, a 500 cajas de leche al minuto que se salvan y que, de otro modo, acabarían en la basura, explicó el presidente de los bancos de alimentos alemanes.
A fines de este año, 77 mil personas trabajaban en los bancos de alimentos alemanes, 72 mil de ellas de forma voluntaria.
Steppuhn precisó que entre el reclamo de medidas se incluyen salarios que protejan contra la pobreza, pensiones y prestaciones sociales que protejan contra la pobreza junto a medidas ante los altos costos de los alquileres.
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