En declaraciones a Al-Masirah TV, Osama Hamdan, dirigente de Hamas, afirmó que la razón de las armas es la ocupación israelí.
Acusó a Estados Unidos de intentar imponer su hegemonía en Oriente Medio y de utilizar a Israel para ese objetivo.
El primer ministro Benjamin Netanyahu comprende que la esencia del proyecto estadounidense se basa en desarmar la región como parte de una estrategia para construir el Gran Israel, estimó.
En similar sentido se pronunció el secretario general adjunto de la Yihad Islámica, Muhammad al-Hindi, quien rechazó la entrega de las armas y acusó a Netanyahu de no respetar el alto el fuego, vigente desde el 10 de octubre en el enclave costero.
En una entrevista con la televisora qatarí Al Jazeera, al-Hindi consideró que ese país no quiere avanzar a la segunda fase del acuerdo de tregua.
Las armas pertenecen al pueblo palestino y no a las facciones, expresó el dirigente del grupo islamista.
Sin embargo, anunció que “mostramos flexibilidad con los mediadores respecto a una tregua con la ocupación (Israel), una congelación (del uso) de las armas o la ausencia de manifestaciones armadas”.
Tanto Netanyahu como el presidente estadounidense, Donald Trump, reclamaron en varias oportunidades el desarme de las milicias palestinas como condición para pasar a una nueva etapa en la Franja de Gaza, devastada tras dos años de agresión.
Hamas aceptó entregar el poder allí, que mantiene desde 2007, pero rechazó de plano entregar las armas al vincular esa posibilidad al fin de la ocupación y a la creación de un estado nacional.
oda/rob





