Este viernes, el exvicemandatario compareció vía telemática desde la Cárcel del Encuentro, en la provincia de Santa Elena, donde se encuentra desde el pasado 10 de noviembre, en la audiencia de hábeas corpus solicitada por su defensa para pedir su traslado a un hospital.
Para su abogada Sonia Vera, el hecho de que las autoridades no lo hayan llevado a la diligencia viola el principio de “cuerpo presente” del habeas corpus, que permite al juez ejercer control directo sobre la situación real de la persona privada de libertad.
“La comparecencia telemática no es la regla, sino una excepción que debe ser expresamente justificada por el Estado y ser compatible con el control judicial efectivo”, apuntó Vera.
Durante su comparecencia, Glas afirmó que su traslado a la Cárcel del Encuentro, aún en construcción, obedeció a un “show mediático-político” y aseveró que ha sufrido tratos degradantes, que desmejoraron su salud.
“Hay que destruir la falacia de las atenciones médicas, que solamente consisten en venir a tomar la presión y medir el oxímetro en la sangre”, agregó el exfuncionario.
Entre sus padecimientos señaló la espondilitis anquilosante juvenil, hipertensión, colitis, gastritis, estreñimiento crónico, trastorno generalizado de ansiedad, depresión grave y profunda, entre otras enfermedades.
Mencionó, que sufre una tortura psicológica sistemática que incluye ruidos industriales y agresiones verbales.
Detalló que en el centro se enciende un extractor de aire cuyo sonido es similar al de una fábrica y está activo hasta 16 horas seguidas.
«Tengo los nervios destrozados», confesó y relató que durante las madrugadas el personal de custodia golpea las puertas, grita insultos y obliga a otros internos a bañarse a las 03:00 de la madrugada.
Por su parte, Andrés Villegas, abogado del exvicepresidente, denunció la existencia de una cámara de audio y video instalada permanentemente dentro de la celda de Glas, lo cual, a su criterio, vulnera la privacidad y contradice estándares internacionales de derechos humanos.
Villegas advirtió que la permanencia de Glas en el penal, bajo las actuales condiciones de salud, representa un riesgo inminente para su vida.
Finalmente, el juez Jean Daniel Valverde, de la Unidad Judicial Penal de La Libertad, provincia de Santa Elena, suspendió la audiencia, que continuará este sábado 27 de diciembre para garantizar la comparecencia de representantes del Ministerio de Salud Pública.
“Esto importa porque las medidas cautelares ordenadas en el proceso son sobre vida, integridad y salud, y el Ministerio de Salud es parte obligada a responder y ejecutar acciones (incluido el traslado hospitalario si existe necesidad médica justificada)”, indicó Vera.
Glas, considerado uno de los símbolos de la persecución judicial o “lawfare” en Ecuador, estuvo en la embajada de México en Quito desde diciembre de 2023 hasta el 5 de abril de 2024.
Ese día, policías entraron violentamente y sin autorización en la legación diplomática y lo aprehendieron pese a contar con asilo por parte del entonces Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
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