Según planteó esa entidad, a los 101 mil 474 ciudadanos que se vieron en la necesidad de abandonar sus comunidades, se suman 110 mil 375 que sufrieron a causa del confinamiento.

Durante el periodo de análisis, abundó la fuente, se registraron 116 eventos que generaron desplazamiento y otros 93 confinamiento, los cuales vulneran los derechos fundamentales de hombres, mujeres y niños, niñas y adolescentes.

Los departamentos de Norte de Santander, Nariño y Cauca concentran la mayor cantidad de los primeros de esos casos, en tanto Chocó, Cauca y Huila tienen los índices más críticos del segundo.

Ante ese panorama, la Defensoría del Pueblo pidió la implementación urgente de políticas específicas de prevención y respuesta en los territorios con mayores índices de desplazamiento forzado y confinamiento.

Estas medidas, instó, deben tener un enfoque territorial y garantizar la presencia efectiva del Estado.

También durante la víspera la entidad alertó sobre el deterioro de la seguridad que vuelve a experimentar la región del Catatumbo, en el noreste del país.

Advirtió que el recrudecimiento de los combates entre los grupos armados Ejército de Liberación Nacional y el Frente 33 provocó que un grupo de pobladores se refugiaran del fuego y artefactos explosivos en una escuela de una zona rural del municipio de Tibú, en Norte de Santander.

Solicitó asimismo el organismo a los grupos armados cesar de inmediato los combates y permitir el ingreso del personal médico para evacuar a las personas heridas y para poder llevar atención humanitaria a la zona afectada.

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