Sajid, de 50 años, murió abatido por la Policía, mientras que su hijo Naveed, de 24 años, permanece detenido y ahora enfrenta 59 cargos penales, entre ellos, 15 por asesinato y uno por terrorismo.
Después de dos semanas de indagaciones, que incluyeron cooperación con Filipinas, las autoridades concluyeron que no existen pruebas de una red terrorista más amplia ni de vínculos con organizaciones externas.
La revisión de registros digitales y financieros respalda la hipótesis de que actuaron en solitario.
El anuncio se produce un día después de que el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, informara sobre la creación de una comisión independiente con acceso total a la investigación.
La misión de tal entidad será determinar si la Policía pudo haber evitado el atentado, en respuesta a las demandas de transparencia de numerosos familiares de las víctimas.
La masacre ocurrió durante una celebración de Janucá en la popular playa de Bondi, con alrededor de dos mil personas presentes, la mayoría perteneciente a la comunidad judía.
Desde un inicio, la Policía australiana calificó el hecho de atentado terrorista y reportó el hallazgo de varias banderas del Estado Islámico en la camioneta de los atacantes.
Más de 40 personas sufrieron heridas, algunas cuando intentaban detener a uno de los tiradores en el balneario más popular de Australia.
Hace pocos días, Albanese homenajeó a Boris y Sofia Gurman, pareja judía de origen ruso residente en Bondi que murió al intentar frenar a uno de los atacantes en los momentos iniciales del atentado.
El primer ministro los calificó de “héroes australianos” y subrayó que su valiente acción en la carretera, previa al primer disparo, permitió alertar a otras personas en la zona.
Durante el hecho terrorista, algunas personas arriesgaron la vida para salvar a otros, entre ellos, los Gurman y el ciudadano de origen sirio Ahmed al Ahmed, quien consiguió desarmar al más joven de los atacantes pese a resultar herido de bala.
Entre las víctimas mortales figuran una niña de 10 años, un rabino y un sobreviviente del Holocausto.
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