En un comunicado difundido por el canal Syria TV, el Centcom informó que fuerzas estadounidenses y aliadas llevaron a cabo 11 operaciones militares entre el 20 y el 29 de diciembre.
Dichas acciones combativas culminaron con la neutralización de al menos siete combatientes del grupo extremista, la captura del resto y la destrucción de cuatro depósitos de armas del grupo en distintas zonas del centro de Siria.
Estas acciones se produjeron después del inicio de la Operación Ojo de Halcón, lanzada el 19 de diciembre, durante la cual fuerzas estadounidenses y jordanas ejecutaron ataques conjuntos contra más de 70 objetivos, utilizando más de 100 municiones guiadas de precisión.
Según el ejército estadounidense, la operación involucró decenas de aviones de combate, helicópteros de ataque y artillería, lo que permitió destruir infraestructura y emplazamientos clave de armas pertenecientes a ISIS (Daesh).
El Pentágono confirmó que el pasado 12 de diciembre, dos soldados estadounidenses y un intérprete civil murieron, y otros tres militares resultaron heridos, tras un ataque armado contra personal estadounidense en la región de Palmira, en el desierto sirio.
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