La afirmación de que es posible destruir a Hamas simplemente arroja arena a los ojos de la opinión pública israelí, afirmó el militar en una entrevista con el Canal 13.

“Hamas es una idea, Hamas es un partido que está arraigado en los corazones de las personas (en el enclave costero), quien piense que podemos eliminar a Hamas está equivocado”, reiteró.

Las declaraciones de Hagari confirman las tensiones entre las Fuerzas Armadas (FDI) y el Gobierno de Netanyahu, quien prometió en numerosas ocasiones la destrucción de esa milicia palestina, destacó el diario electrónico The Times of Israel.

Poco después, en respuesta al portavoz, la oficina del primer ministro ratificó en un comunicado que uno “de los objetivos de esta guerra es la destrucción de las capacidades militares y de gobernanza de Hamas”.

A su vez, la unidad de voceros de las FDI afirmó en una declaración que el alto mando está comprometido con los planes propuestos por el gabinete y detalló que Hagari solo se refirió a “erradicar a Hamas como una ideología y una idea”.

Televisoras nacionales revelaron en los últimos días que tanto el jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, y del Shin Bet (servicio de seguridad interior), Ronen Bar, pelearon recientemente con Netanyahu por la planificación estratégica del conflicto.

Existen otros signos recientes de fricción entre el Ejército y el político derechista, incluidas las “pausas tácticas”, adoptadas por los militares en la lucha a lo largo de una carretera en el sur de Gaza, recordó el rotativo.

Según las proyecciones castrenses israelíes, Hamas tenía entre 30 mil y 40 mil milicianos en Gaza antes del inicio de la guerra, en octubre del pasado año, de los cuales perdió la mitad, aunque el grupo armado desmintió tal cantidad de bajas y aseguró que tiene capacidad para luchar durante muchos meses.

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