Al lanzar la alerta, las autoridades dijeron que estas anomalías están vinculadas a la cercanía de una onda a Centroamérica y la Zona de Convergencia Intertropical, lo que puede ser más peligroso pues aun el país se reciente de las precipitaciones que lo afectaron desde el 14 al 22 de junio de forma ininterrumpida y que dejaron suelos saturados de agua.
«Durante el viernes, con énfasis en horas de la noche, existe probabilidad de una situación de tipo temporal con intermitencia, afectando principalmente la franja central y zona costera del territorio», sostiene el informe especial número 2 del ministerio.
La onda se localiza este jueves sobre el océano Atlántico, y esta mañana se ubicaba frente a las costas de Nicaragua; además, de la cercanía de la Zona de Convergencia Intertropical sobre el Océano Pacífico, rodeando a la región con nubosidad y humedad.
Las primeras precipitaciones están previstas a finales de la tarde de este jueves desde la zona norte con fuerte actividad eléctrica, lo cual ratificará a junio como el mes más mojado en los últimos 54 años en este país.
Las lluvias de mediados de mes dejaron acumulados en lugares del departamento de Ahuachapán superiores a los 860 milímetros, mientras en otros superaron las cifras históricas.
Los expertos alertan que dada la saturación de los suelos pueden ocurrir caídas de árboles y alertan sobre probables deslizamientos de tierra. Mientras tanto una onda tropical que ubicada a varios cientos de kilómetros de la Isla de Cabo Verde puede avanzar y convertirse en tormenta tropical con amenaza para América del Sur y en su desplazamiento llegar a la región Centroamericana. Esta anomalía tiene un 70 por ciento de posibilidades de desarrollarse en los próximos siete días.
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