Nuestras limitaciones son para el uso de los F-16 donados a Kiev solo en suelo ucraniano, declaró el primer ministro interino belga, Alexander De Croo, al llegar a Washington para la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), señaló aquí la televisión.

Bélgica se sumó así a otras naciones como Países Bajos, Dinamarca, Estados Unidos y Polonia que ya asumieron compromisos para el entrenamiento de pilotos y el envío de cazas F-16 a Ucrania, en medio de la amenaza que esos aparatos puedan atacar el territorio ruso.

El 24 de febrero de 2022, el presidente Vladimir Putin ordenó una operación bélica para proteger a la región sublevada del Donbás, que denunció ocho años de genocidio de Kiev, cuyas autoridades ya recibieron 165 mil millones de dólares en armamentos por parte de Occidente.

Las tropas ucranianas reforzaron en los últimos meses sus ataques directos a instalaciones civiles en regiones rusas como Vélgorod y Kursk, así como en Rostov del Don, con varias decenas de muertos y heridos.

Rusia advirtió recientemente que la utilización de los F-16, capaces de portar armas nucleares, complica aún más la participación casi directa de la OTAN en el conflicto ucraniano en el que Moscú se vería obligado a garantizar su seguridad por todas las vías posibles.

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