De acuerdo con él, se producen cambios en Europa y en 2015, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, fue el primero en decir que el espacio Schengen colapsaría si la UE no respetaba las leyes comunitarias.

Según él, citado por MTI, la decisión de Alemania del 9 de septiembre de introducir controles adicionales en las fronteras estatales interfiere con la libre circulación dentro de la UE.

Primero causaron daño al no permitir que los países de la UE defendieran eficazmente sus fronteras exteriores, y ahora destruyen la comunidad al introducir restricciones en las internas, concluyó el jefe de la oficina de Orban.

El 4 de septiembre, el asesor de seguridad del primer ministro húngaro, Gyorgy Bakondy, indicó que Budapest no tiene intención de implementar la decisión del Tribunal de Justicia de la UE sobre la concesión de asilo a los inmigrantes ilegales que llegan al país, a pesar de las multas impuestas al país. Anteriormente, el Tribunal de Justicia de la UE impuso a Hungría una multa de 200 millones de euros, así como pagos diarios de un millón de euros, por negarse a cumplir decisiones judiciales anteriores relacionadas con las normas para la recepción de inmigrantes.

Como se explica en la sentencia, la violación por parte de Budapest de las leyes de asilo de la UE se refería a la restricción del acceso al procedimiento de protección internacional, la detención ilegal de solicitantes en zonas de tránsito.

También incluye el incumplimiento de su derecho a permanecer en territorio húngaro en espera de una decisión final sobre su recurso contra la denegación de su solicitud, así como la expulsión de nacionales de terceros países en situación irregular.

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