“Solicité a la República Islámica de Irán que actuara con moderación. No solo eso, sino también, si fuera posible, que dejara de aumentar sus reservas de uranio enriquecido al 60 por ciento. Debo decir que mi solicitud fue aceptada”, dijo el funcionario ante la Junta de Gobernadores del OIEA, reunida aquí.

El pasado 16 noviembre el Organismo verificó sobre el terreno, mediante la visita a instalaciones, que las autoridades en Teherán comenzaron a implementar medidas preparatorias para detener el aumento del inventario.

“Algunos pasos técnicos iniciales, verificados por mis inspectores, ya se llevaron a cabo esta semana, y espero que podamos consolidarlos. Creo, por supuesto, que este es un paso inicial. Hay mucho por hacer”, afirmó Grossi.

Sin embargo, Alemania, Francia y Reino Unido, con el respaldo de Estados Unidos, presentaron este miércoles una resolución ante la Junta de Gobernadores del OIEA con el objetivo de condenar a Teherán por su supuesta falta de cooperación.

Reclamaron a la institución un informe integral sobre las actividades nucleares iraníes, lo cual denota la continuidad de las presiones de Occidente.

En julio de 2015, Irán y seis mediadores internacionales (Rusia, Estados Unidos, el Reino Unido, China, Francia y Alemania) suscribieron un Plan de Acción Integral Conjunto, el cual impuso una serie de limitaciones al programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de restricciones internacionales.

Pero en mayo de 2018 Estados Unidos quebró el acuerdo y empezó a imponer sanciones unilaterales a Irán bajo la premisa infundada de que la nación persa usaba el uranio para fabricar armas nucleares.

“Resulta claro que la acumulación de uranio enriquecido a niveles muy altos ha sido un motivo de preocupación”, dijo Grossi este miércoles.

Según alertó el canciller Abás Araqchí, si las otras partes ignoran la buena voluntad y el enfoque de cooperación de Irán y llevan a cabo “acciones no constructivas” en la reunión de la Junta de Gobernadores con la emisión de una resolución, el país responderá de manera apropiada y proporcional.

El uso pacífico de la energía atómica en función del desarrollo socioeconómico constituye una prioridad para el Estado nacional, sustentan distintos pronunciamientos del Gobierno iraní.

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