Las promesas de los estafadores van desde compartir herencias con solo revelar el número de cuenta bancaria o depositar fondos, operaciones en criptomonedas y ofrecer amor eterno matrimonio a corazones solitarios de personas de ambos sexos, pasando por otras más disparatadas, pero que siempre encuentran interesados en ganar dinero fácil.

Entre los arrestados en la operación realizada el pasado martes 10 del mes en curso figuran ciudadanos chinos y filipinos, según el comunicado de la Comisión de Delitos Económicos y Financieros (EFCC, siglas en inglés).

El edificio aparecía como un inocente y por supuesto legal centro de llamadas y mensajes telefónicos y se apoyada en una red de informantes nativos encargados de proporcionar los datos de candidatos a ver esfumarse los ahorros de toda su vida tanto en Nigeria, como en países de otros continentes.

Con todo y lo espectacular del arresto masivo, las autoridades nigerianas no se dan por satisfechas y anunciaron una investigación en curso para conocer los probables lazos con el crimen organizado.

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