El paro transcurrió sin protestas callejeras ni incidentes entre los huelguistas y las fuerzas del orden, según reportes provenientes del resto del país, donde fue acatado lo que obligó a mantener cerrados los planteles.
Los educandos se concentraron en los alrededores de varias escuelas en solidaridad con la demanda de sus profesores, pero se abstuvieron de manifestarse en las calles.
El sistema educacional argelino es gratuito y recibe una porción sustancial del presupuesto nacional, pero los maestros aducen que es muy inferior a la asignación dedicada a la defensa nacional.
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