En un Foro de Mujeres en Colombo, la jefa de Gobierno dijo que Sri Lanka se encuentra en la etapa de construcción de su desarrollo que requiere de cambios necesarios y de lo que denominó corrección de errores.

Sin embargo, refirió que esa transformación no puede lograrse solo por el gobierno, y apeló al trabajo en colectivo en función de esa meta con los funcionarios gubernamentales, los líderes religiosos y los ciudadanos.

También convocó a una participación más activa de las mujeres en el progreso del país con roles de liderazgo.

Amarasuriya intercambió, además, sobre el programa Clean Sri Lanka que, explicó, no se centra únicamente en la limpieza ambiental, también pretende transformar la mentalidad y el comportamiento.

Las mujeres desempeñan un papel crucial en este viaje de transformación nacional, puntualizó.

La primera ministra esrilanquesa habló también del presupuesto de este año, el cual, dijo, se diseñó con la democracia económica como eje central, garantizando beneficios para todos con la contribución de los sectores público y privado, las cooperativas y los ciudadanos a la gestión económica.

Detalló aspectos sobre las asignaciones al sector de la educación, la mayor contribución de la historia que ha experimentado esa esfera en Sri Lanka.

Para mejorar la educación y proporcionar oportunidades de aprendizaje de calidad a los estudiantes, los maestros deben estar capacitados tanto en conocimientos como en espíritu, acotó.

La jefa de Gobierno se refirió al programa para integrar a las mujeres en la economía, eliminando gradualmente las barreras a su participación.

Exhortó, asimismo, a crear oportunidades para facilitar capacitación técnica y de conocimientos modernos a quienes se dedican a la agricultura, en función del fortalecimiento de la economía rural.

El gobierno cree firmemente que la educación de calidad es la clave para la transformación nacional y, en consecuencia, se introducirán nuevas reformas educativas a partir de 2026, adelantó.

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