Políticos y activistas denunciaron en redes sociales que el número telefónico Amodaimi, registrado en la Superintendencia de Compañías, es el mismo de El Ordeño, pero de acuerdo con esa entidad, la información es falsa.

Las alarmas se encendieron porque El Ordeño tiene como accionista minoritario a la firma Agroindustrias San Esteban, que a su vez tiene como una de sus accionistas a Isabel Noboa, tía del mandatario.

Mediante un comunicado, la empresa afirmó que nunca ha tenido ni tiene relación societaria, contractual o de cualquier otro tipo con las compañías mencionadas.

El texto añade que El Ordeño no se hace responsable por la información registrada por otras compañías, aunque solicitó formalmente esclarecer el origen del registro o exigir su inmediata corrección.

Amodaimi-Oil Company S.L y Petrolia conforman el consorcio Sinopetrol, al cual el Ministerio de Energía y Minas adjudicó la operación de Sacha, el campo petrolero más productivo del país.

En medio de la polémica, el abogado ecuatoriano Washington Andrade presentó un acto urgente ante la Fiscalía General del Estado, para que se investigue este proceso de adjudicación por presuntos delitos de peculado, corrupción en el sector privado y traición a la Patria.

La Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Ecuador aseguró que la estatal Petroecuador está en condiciones de continuar las operaciones del campo Sacha.

El grupo parlamentario indicó que la producción de Sacha aumentó, ya que hace cuatro años producía 65 mil barriles diarios y actualmente son 77 mil.

La ministra de Energía y Minas, Inés Manzano, confirmó en rueda de prensa el pasado lunes que el campo petrolero será operado por Sinopetrol porque dejó de de ser la “joya de la corona” y es «una corona oxidada» que necesita ser «pulida» y «recuperada».

La Asociación de Trabajadores de la Energía y el Petróleo (Antep) calificó como “estafa disfrazada de buenas intenciones” la decisión del Gobierno ecuatoriano de adjudicar a un consorcio extranjero el bloque extractivo más productivo del país.

Actualmente, el Estado controla el 100 por ciento de la producción en Sacha, sin embargo, con el esquema explicado a la prensa, Ecuador recibirá entre el 12,5 por ciento y un máximo del 26,5 por ciento de la producción, y esto último sólo si el precio del barril de crudo alcanza 120 dólares.

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