Fuentes oficiales atribuyen la baja a un déficit de capacidades en las aerolíneas y su equivalencia en menos turistas, pero para el economista Luis Vargas, estos reaccionan contra la pérdida de competitividad del país por los altos precios, que lo ubican entre los más caros del mundo.

También influye en dicha disminución el comportamiento del tipo de cambio de un dólar debilitado frente al colón, lo cual reduce la capacidad adquisitiva de los turistas, consideró el experto.

La reducción del número de visitas –precisa Vargas- ocurre principalmente desde Norteamérica y Europa, los dos principales mercados del país.

El Ministerio de Turismo, por su parte, insistió en que las líneas aéreas, sobre todo las de ambos emisores de visitantes, redujeron en el período su cantidad de asientos en los aviones con destino a Costa Rica.

“Estamos implementando una serie de medidas que estamos seguros lograrán la recuperación de esos asientos», explicó el titular de esa cartera, William Rodríguez.

Según el Ministro, aerolíneas como American Airlines, Delta y Alaska Airlines bajaron su oferta de asientos en naves con destino a este país en un 15 por ciento, 17 por ciento y 41 por ciento, respectivamente.

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