En el encuentro virtual de jefes de Estado y de Gobierno, Lourenço señaló la necesidad de avanzar en esa propuesta teniendo en cuenta los graves acontecimientos relacionados con la inestabilidad en el este congoleño, así como de las iniciativas y esfuerzos diplomáticos para una solución pacífica y negociada.

Al respecto, recordó que la cumbre entre RDC y Ruanda prevista para el 15 de diciembre de 2024 en Luanda no se celebró debido a la ausencia de la parte ruandesa, lo que frustró la firma del Acuerdo de Paz propuesto por la Mediación.

El documento incluía aspectos como la Neutralización de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y la retirada de las Fuerzas de Defensa de Ruanda del territorio congoleño.

Posteriormente hubo un resurgimiento de las acciones, ataques y conquista de territorios, lo cual se intensificó en enero de 2025 con la toma de ciudades importantes como Goma y Bukavu, dejando a las provincias de Kivu Norte y Kivu Sur prácticamente bajo control del Movimiento 23 de Marzo (M23).

También se canceló una negociación directa entre representantes del Gobierno de la RDC y el M23, que debía tener lugar en Luanda el 18 de marzo último, pero a la cual los rebeldes se negaron a asistir al último minuto, supuestamente por las sanciones impuestas por entidades/países de fuera del continente.

“Quisiera destacar que la aceptación del principio de negociaciones directas entre el Gobierno de la RDC y el M23 constituye, en sí mismo, otro gran paso adelante logrado por el Proceso de Luanda”, sostuvo Lourenço en la reunión.

Ponderó las dos cumbres conjuntas de las comunidades para el Desarrollo del África Austral (SADC) y de África Oriental (CAO) que recomendaron la inclusión de otros facilitadores en el proceso de paz, así como la fusión de los procesos de Luanda y Nairobi.

En ese escenario, y dado que al asumir la presidencia de la UA el mandatario angoleño emitió un comunicado renunciando a seguir liderando los esfuerzos de mediación entre Kinshasa y Kigali, consideró urgente avanzar en la identificación de un Mediador, en la figura de un jefe de Estado.

El nuevo encargado trabajará de conjunto con la SADC, la CAO y los Facilitadores, precisó Lourenço, quien propuso un nombre que no se ha hecho público hasta el momento, pero de conformidad con el reglamento de la Asamblea de la UA, la Comisión de la organización realizará un proceso de consultas al final del cual se anunciará la decisión.

La cita también abordó un probable calendario de actividades encaminadas a la solución del conflicto, sobre la base de los avances de los procesos de Luanda y Nairobi.

Lourenço reiteró “el papel central y de liderazgo de la Unión Africana” en la resolución de conflictos en el continente.

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