De esta forma el máximo tribunal confirmó una orden judicial de un tribunal inferior que solicitaba la devolución de Abrego García, migrante salvadoreño con residencia legal en Maryland, enviado a una cárcel en su país natal en uno de los vuelos de la administración Trump con presuntos pandilleros expulsados.
El viernes pasado, la jueza federal de distrito Paula Xinis emitió una orden para que el gobierno -que admitió previamente la pifia- regrese a Abrego García, en respuesta a una demanda interpuesta por él y su familia que impugna la legalidad de su deportación.
Pero el lunes, el presidente de la Corte Suprema John Roberts, horas antes de cumplirse el plazo de Xinis, suspendió temporalmente esa orden que exigía el retorno antes de las 23:59 de ese día, bajo el argumento de que necesitaba más tiempo para considerar el asunto.
La disputa sobre la deportación de Abrego García generó gran atención mediática e indignación en la opinión pública luego de que el Gobierno de Trump reconociera en un documento judicial que la decisión fue un «error administrativo» y un «descuido».
El joven padre fue asociado con la supuesta pertenencia a la pandilla MS-13. Al momento de su detención en Maryland recogía en la escuela a su pequeño hijo, que es autista.
Sus abogados escribieron que su defendido «nunca ha sido acusado ni condenado por ningún cargo penal, ni en Estados Unidos, ni en El Salvador, ni en ningún otro país».
rc/dfm





