Hasta el jueves la Policía Nacional Civil (PNC) no informó de ningún asesinato y el mes avanza para alcanzar cifras como las 25 jornadas de enero, las 26 de febrero, 22 en marzo y 25 en abril, una tendencia que de proseguir permitirá disminuir la tasa anual de 1.9 por cada 100 mil personas alcanzada en 2024.

Estos resultados son atribuidos a las estrategias de seguridad pública como el Plan Control Territorial y el Régimen de Excepción, vigente desde el 27 de marzo de 2022, medidas que algunas naciones como Ecuador tratan de imitar.

El gobierno logró hasta ahora detener a cerca de 86 mil pandilleros y presuntos colaboradores.

Sin embargo, todo estos éxitos son puestos en duda luego que el pandillero Carlos Cartagena, alias «Charly de la IVU», cabecilla de la mara Barrio 18 Revolucionarios, dijera en entrevista con el diario digital El Faro, que el gobierno o algunos funcionarios cercanos al mandatario pactaron con las pandillas.

Presuntamente Cartagena señaló que los acuerdos o tratativas se iniciaron en 2014, cuando Bukele se presentaba como candidato a la alcaldía de la capital, San Salvador.

Los contactos tuvieron lugar durante años y, según la fuente, algunos de los delincuentes llegaron incluso a escapar del país con la complicidad de las altas esferas.

No obstante, hubo un giro en 2022, cuando la masacre de más de 80 personas un fin de semana de marzo presuntamente provocó la ruptura de la relación.

A partir de ese momento, Bukele, ya presidente, declaró el estado de excepción y dio inicio a la política de mano dura contra los grupos calificados de terroristas por la Asamblea Legislativa.

El Faro publicó además, declaraciones de otro pandillero del Barrio 18 que mantiene el anonimato. Ambos revelan cómo las maras contribuyeron al ascenso de Bukele al poder y los detalles de sus acuerdos.

Estos informes son destacados por algunos medios y parlamentarios opositores como Claudia Ortiz, de Vamos, que piden investigar mientras el gobierno niega eos pactos con las maras, y sin en algún momento existieron, ya no, afirman voceros. Así, en medio de controversias y acusaciones avanza la seguridad en el país, hasta ahora presentada como el principal éxito de Bukele desde que llegó al gobierno en 2019.

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