“Estoy viviendo una experiencia que no se la deseo a nadie. Simplemente es la libertad. La libertad es muy preciada. Cuando uno la tiene, no la aprecia tanto como cuando se la quitan sin motivos”, añadió el ciudadano del país centroamericano arrestado por protestar contra las autoridades migratorias.

El costarricense, detenido por agentes de inmigración en Nueva Jersey que lo deportarán en los próximos días tras dos décadas en la nación norteña sin antecedentes penales, reconoció que “si bien algunas personas detenidas cometen delitos, muchas otras son víctimas de políticas migratorias cada vez más estrictas”.

“Es cierto que hay muchos buscados porque tienen crímenes. Sin embargo, hay otros tantas personas que se están viendo afectadas como víctimas de esta situación, de esta persecución a los inmigrantes”, explicó.

Según el canal, la detención de este emigrante tico, quien habló desde el lugar donde permanece recluido, ocurre en el contexto de una creciente ola de redadas migratorias en Estados Unidos que generan protestas masivas a nivel nacional e internacional.

Por su parte, su esposa, en casa junto a sus hijos, aseguró que, tras 18 años de vivir en Estados Unidos, por primera vez, sienten un nivel de inseguridad tan alto.

“He hablado con varios abogados y no me dan ninguna solución para mi esposo. Nunca habíamos sentido tanto peligro y se cumplió el temor que él siempre vivía”, relató la cónyuge, quien acordó con su familia reunirse nuevamente en Costa Rica una vez que su esposo sea deportado.

Ambos –asegura el canal- forman parte del creciente número de familias migrantes que enfrentan procesos de detención y deportación en Estados Unidos bajo la actual administración, lo cual genera miedo en muchas comunidades.

“No somos los únicos, hay muchas personas que están viviendo lo mismo que nosotros -comentó la esposa del detenido. Tienen temor de hablar públicamente, de poder mostrar su rostro, identificarse”.

La situación –recordó Teletica.com- coincide con manifestaciones en todo Estados Unidos que este viernes movilizaron a miles de personas en más de dos mil ciudades.

Los actos de protesta coincidieron con un desfile militar celebrado en Washington por el 250 aniversario del ejército estadounidense y el cumpleaños número 79 del presidente Donald Trump.

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