En un sábado fresco y nublado, Márquez se defendió con maestría del asedio constante de su hermano Álex), quien finalizó segundo tras una vibrante batalla fraternal que dominó buena parte del espectáculo neerlandés.
La carrera comenzó con tensión desde la salida: el francés Fabio Quartararo logró contener a Marc en la primera curva, pero pronto el del Ducati se colocó en cabeza antes de la chicane de meta, seguido por su hermano. El dominio español fue absoluto desde entonces.
Detrás, el italiano Marco Bezzecchi, a bordo de su Aprilia, escaló hasta el tercer puesto para cortar el pleno de Ducati en los podios Sprint de esta temporada. El también italiano Francesco Bagnaia sufrió para mantenerse en posiciones de honor, mientras que su compatriota Fabio Di Giannantonio llegó incluso a superarlo brevemente.
Las advertencias por exceder los límites de pista fueron una constante: pilotos como Bezzecchi y los españoles Viñales, Fermín Aldeguer y Pedro Acosta fueron penalizados, y este último terminó perdiendo la séptima plaza tras recibir una sanción de tres segundos.
El galo Quartararo, que salía desde la pole, acabó por los suelos en la curva 10, firmando su séptima caída de la temporada.
Marc Márquez suma ahora nueve victorias en 10 Sprint este año y amplía su ventaja en el campeonato: ya le saca 43 puntos a su hermano Álex y 117 al italiano Bagnaia. Su rendimiento es tan implacable como constante, sin ceder ni ante el dolor, ni ante las piedras, ni ante la lluvia que aún amenaza el domingo.
arc/blc





