Igualmente, gestionan el apoyo de aliados habituales del oficialismo a fin de garantizar los votos necesarios para sortear un posible veto del presidente Javier Milei quien ve que está semana se le complica: una sesión especial el jueves en el Senado puede convertir en ley el aumento extraordinario a las jubilaciones, la prórroga de la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad.
Luego de la última sesión el pasado miércoles que terminó en un escandaloso cruce entre legisladores de Unión por la Patria (UxP) y el oficialista La Libertad Avanza (LLA), los opositores quieren avanzar para aprobar proyectos vinculados a financiamiento universitario y el alza salarial a los médicos del hospital pediátrico Dr. Garrahan, y otros, en la primera semana de agosto, una vez finalizado el receso invernal que será del 21 al 27 de julio.
El objetivo de UxP y sus aliados es lograr reunir los dos tercios necesarios para superar un veto por parte de Milei. Antes, deberán garantizar el quórum en los dos plenarios de comisión que deben emitir dictamen, condición indispensable para que las iniciativas puedan llegar al plenario.
Uno de los avances en la ruidosa última sesión estribó en que varios legisladores que habitualmente se pliegan al oficialismo acompañaron los emplazamientos para avanzar con ambos proyectos, a pesar del rechazo del mandatario libertario.
Entre quienes votaron a favor se encuentran los diputados del PRO Héctor Baldassi y Sofía Brambilla; los radicales Mariano Campero y Martín Arjol, referenciados en la Liga del Interior; la libertaria Marcela Pagano; la exLLA Lourdes Arrieta; Oscar Zago y Eduardo Falcone, del Movimiento de Integración y Desarrollo; además del misionero Alberto Arrúa y la salteña Yolanda Vega.
La postura de estos legisladores –indican analistas- representa una señal de advertencia para el oficialismo, ya que podría enfrentar serias dificultades para sostener eventuales vetos, dado que LLA no contaría con los 87 votos necesarios, como ocurrió el año pasado cuando bloqueó las leyes de movilidad jubilatoria y financiamiento universitario.
Las votaciones para emplazar a las comisiones fueron contundentes, el proyecto vinculado al Garrahan obtuvo 164 votos afirmativos contra 66 negativos, mientras que el de universidades se aprobó por 168 a 61, dejando en evidencia la fragilidad del bloque oficialista frente al rechazo de buena parte del Congreso a la postura del Ejecutivo.
Milei también afronta otro desafío legislativo: el Senado puede convertir en ley el jueves el aumento extraordinario a las jubilaciones, la prórroga de la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad.
Estas iniciativas que ya fueron sancionadas por la Cámara de Diputados obligarían a un nuevo veto de Javier Milei con la salvedad de que esta vez la Casa Rosada no contaría con el apoyo de sus aliados para sostener el rechazo del Ejecutivo a estas leyes.
La avanzada opositora en la Cámara Alta llega además en medio de un nuevo y convulsionante capítulo de la lucha intestina libertaria tras las acusaciones desde la Casa Rosada contra la vicepresidenta, Victoria Villarruel, por habilitar el recinto para que los bloques opositores desplieguen su propia agenda legislativa.
Además del proyecto de aumento jubilatorio, los senadores podrían dar rúbrica para hacer automático el giro a provincias de los Aportes del Tesoro Nacional, y la eliminación de los fondos fiduciarios que se fincan con el impuesto a los combustibles para que los gobernadores pueden disponer libremente y sin condicionamientos de esas partidas, algo a lo que se opone el presidente.
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