El medicamento debe administrarse a los recién nacidos dentro de las primeras 24 horas después del nacimiento y, de no ser posible, aplicarse antes de que el bebé cumpla dos meses.
Esta donación apoya los esfuerzos de Myanmar para implementar con éxito sus programas de prevención de tuberculosis y fortalece la cooperación entre ambos países en materia sanitaria.
El Departamento de Salud Pública de Myanmar coordinará la distribución y aplicación de las vacunas a nivel nacional.
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