Tras ser adoptada una resolución por unanimidad de ese ente, el secretario general de la ONU, António Guterres, denunció el horror que se vive en Gaza y la inacción a nivel global, al tiempo que recordó que la diplomacia preventiva y el arreglo pacífico de disputas no son opciones secundarias, sino herramientas vitales consagradas en la Carta del organismo que preside.
El documento emitido por el Consejo subraya también la importancia de garantizar la participación igualitaria de las mujeres y los jóvenes en los enfoques e iniciativas de prevención y solución de conflictos.
El debate fue dirigido por el viceprimer ministro pakistaní, Mohammad Ishaq, y participaron Guterres; el subsecretario de Estado de Reino Unido, Ray Collins; y los embajadores de más de 70 países.
Durante el mismo, el titular de la ONU resaltó el vínculo directo entre la paz y el multilateralismo, y alertó sobre los crecientes peligros de un sistema internacional que ignora las normas fundamentales del derecho.
La resolución subraya que “todos los Estados deben arreglar sus controversias por medios pacíficos a través del diálogo, las gestiones diplomáticas y la cooperación, de tal manera que no se pongan en peligro la paz, la seguridad y la justicia”.
Guterres señaló que la ONU fue fundada hace 80 años precisamente para “salvaguardar a la humanidad del flagelo de la guerra”, y citó el artículo 2.3 y el capítulo VI de la Carta como pruebas del mandato del Consejo para prevenir y resolver conflictos por medios como la mediación, la conciliación o el arbitraje.
Sin embargo, esas disposiciones a menudo no se respetan, lamentó y cuestionó el desprecio total por el derecho, así como las violaciones flagrantes de mismo, sin ninguna rendición de cuentas.
En ese sentido, se refirió a los asesinatos y la destrucción en Palestina, perpetrados por las fuerzas israelíes, y condenó los ataques a instalaciones de la ONU, incluyendo oficinas de la Organización Mundial de la Salud y el Organismo para Proyectos, cuyas ubicaciones fueron notificadas a todas las partes.
“Estos locales, como todos los sitios civiles, son inviolables”, dijo.
Asimismo, denunció el bloqueo israelí a la entrada de ayuda humanitaria y expresó su preocupación por la desnutrición y la hambruna en Gaza.
Guterres también mencionó los conflictos en Ucrania, el Sahel, Sudán, Haití y Myanmar, y alertó sobre niveles récord de hambre y desplazamiento.
Ante tal escenario, instó al Consejo a superar divisiones, modernizar su estructura para reflejar el mundo actual y fortalecer la cooperación con organizaciones regionales.
Pidió mantener abiertos los canales de diálogo, escuchar de buena fe y trabajar para superar las diferencias y construir consensos.
“La paz es una elección y el mundo espera que este Consejo ayude a los países a optar por ella”, aseveró.
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