“Siempre es extraordinario hablar de lo que la gente no quiere ver y reconocer, se trata de todos los aportes que ha hecho el pueblo negro a la liberación de nuestros países”, afirmó la embajadora colombiana, Elízabeth García, en entrevista concedida a Prensa Latina.

Durante la plática en el céntrico cine teatro paceño 6 de Agosto, la diplomática dijo a esta agencia de noticias que “es hora de empezar a pagar esa deuda, y la única manera de hacerlo es empezar a decir la verdad, así como sabemos hacerlo con nuestros cantos, bailes y tambores”.

García informó que se realizó una gira muy exitosa en la cual estuvo Plu con Pla, una banda de Tumaco, a nivel del mar, que combina el reggae y el rap con la música tradicional del Pacífico sur de Colombia.

Mencionó que también llegó Palenque Colonial, una escuela recóndita, muy pequeñita, que trabajan por el tema educativo en el Caribe colombiano, y cultiva el bullerengue, con música, cantos y una danza de profunda raíz africana.

“Asimismo, -describió García-, estuvieron los grupos vallenato que hacen música aquí en Bolivia y con todo esto nos juntamos con los hermanos de la saya afroboliviana, porque lo que pretendíamos era que todos entraran en un bus y comenzaran a hablarse y a recorrer este pueblo de una manera distinta”.

Informó que realizaron un gran Concierto en Manzana Uno, departamento de Santa Cruz, pasaron después a Sucre, el 20 de julio, Día de la Independencia de Colombia, y estuvieron en una gran plaza, en la gala denominada Rompiendo Cadenas.

“Después pasamos a la Casa de la Libertad, en Sucre, pues hacía falta que ese Grito de Independencia fuera firmada también por ellos, los afrodescendientes, quienes estaban siempre al frente en la guerra y que nunca han sido reconocidos”, subrayó.

Destacó que, más tarde, viajaron a Potosí, y entregaron en la Casa de la Moneda la primera afroboliviana, que va a estar presente ahí, diseñada por la gran artista plástica afroboliviana Sharon Pérez.

“Ella es una gran mujer afroboliviana, una gran creadora, quien diseñó esta moneda, la macuquina, está allí, en Potosí, y ahora solo resta que los visitantes a ese centro cultural empiecen a pedirla, pues quien la tenga será un privilegiado”, enfatizó la embajadora.

“Yo creo que todos estos artistas despertaron a los ancestros con la cantidad de tambores que sonaron ese día en la Casa de la Moneda”, comentó la diplomática.

García resaltó que, finalmente, en La Paz, todo este elenco protagonizó cuatro conciertos al que concurrieron muchas personas.

La entrevista transcurrió durante la cuarta y última presentación en el cine teatro 6 de Agosto, en medio del baile que fundió en la alegría a legisladores, una amplia representación del cuerpo diplomático acreditado y cientos de invitados bolivianos e integrantes de la comunidad de residentes colombianos.

“Quedamos muy felices porque se logró el objetivo cultural”, concluyó la embajadora García.

oda/jpm