El investigador social Euclides Méndez, del Instituto de Estudios Nacionales (Iden) de la Universidad de Panamá consideró que una muestra reciente fue la represión policial a protestas contra una norma de pensiones y a manifestantes en la provincia Bocas del Toro.
Sobre sus estudios de esta problemática, el experto explicó al diario La Estrella de Panamá que el país ha vivido tres coyunturas de fuente confrontación social, en 2022, 2023 y ahora este año con las manifestaciones contra la Ley 462 de la Caja de Seguro Social (CSS).
Recordó que en ocasiones anteriores el detonante fueron el alza de la gasolina, el aumento del precio de los medicamentos, alimentos, la minería, en los que los actores del interior del pais se incorporaron como actores de importancia en la sociedad.
La percepción de corrupción y ahora la reforma de la CSS, siempre hay de subyacente algo, lo otro es el desgaste de la cotidianidad de la opinión pública, indicó.
De otro lado señaló sobre el presidente de la República, José Raúl Mulino que si en menos de un año cayó en aceptación de un 75 a un nueve por ciento, algo que ningún mandatario de la región ha experimentado y pocos en la historia han llegado a ser tan impopulares; y sobre todo decir después, públicamente, que no le importa, son aspectos que generan problemas.
Para el investigador es importante saber los niveles de popularidad conque cuenta el jefe de Estado, porque eso denota que la sociedad es un ente vivo.

De otra parte indicó que su hipótesis central señala que Panamá está pasando de ser un Estado fallido a una dictadura civil y se dirige hacia una dictadura militar.
En ese sentido señaló el uso de la fuerza para que se acepten proyectos de la élite en lugar de recomponer las instituciones y restaurar la democracia.
Al respecto indicó que el incremento de dos mil policías en la actual administración que podrían servir para enfrentar la criminalidad , han servido para reprimir las protestas y a los actores sociales.
A ello agregó que lo más grave es el hecho de saber que han llegado las fuerzas armadas de Estados Unidos y están programando una guerra, lo dicen todos los geopolíticos del mundo, nos llevan a una guerra, remarcó.
Sobre este tema, también el secretario general del sindicato de los obreros de la construcción, Saul Méndez, quien abandonó el asilo en Bolivia, presumiblemente hacia Venezuela, según informativos locales, debido a amenazas para su vida, indicó recientemente que el pueblo panameño está reprimido y debe enfrentar y derrotar al dictadorzuelo (Mulino) en sus pretensiones.
En entrevista al medio digital argentino El Grito del Sur, Méndez aseguró desde su clandestinidad, que retornará a Panamá para enfrentar y derrotar a los represores.
Al respecto, consideró que gobernar no debe ser imponer, sino obedeciendo al pueblo. “Es la democracia a la que aspiramos”, aseveró.
El también ex candidato presidencial en 2019 rechazó la persecución a la organización de los constructores, su cooperativa y denunció un memorando suscrito en abril último por el Gobierno y Estados Unidos sobre seguridad, lesivo a la soberanía, estimó, pues permite el incremento de tropas y el establecimiento de bases militares en el territorio nacional.
Todo esto lo estamos enfrentando en las nuevas condiciones, dijo, con un selecto equipo de abogados penalistas, laboralistas, constitucionalistas, a través de instituciones mundiales, como la ONU y la Organización Internacional del Trabajo.
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