Organizado por el Ministerio de Seguridad, en el foro expertos de varios países analizaron las implicaciones del auge de estupefacientes como el fentanilo, las metanfetaminas de alta pureza y otros opioides.

De acuerdo con sus análisis, estas nuevas sustancias han transformado el panorama del crimen organizado, desestabilizado comunidades y cobrado vidas a un ritmo alarmante en el ámbito global.

Asimismo, debatieron sobre el funcionamiento de laboratorios clandestinos, las redes internacionales de distribución y cómo la rapidez y sofisticación del crimen organizado han superado la capacidad de respuesta de las autoridades.

“El verdadero alcance de la amenaza: ¿Dónde se producen estas drogas? ¿Quiénes están detrás de su comercialización?” e “Impacto devastador: Consecuencias sanitarias, sociales y económicas en las comunidades”, sobresalieron entre los temas abordados en los talleres.

Para algunos participantes en la cita, como el exdirector de la Policía de Colombia, Jorge Vargas, hay un desconocimiento generalizado de las drogas sintéticas en el mundo y alertó que estas sustancias tienen el potencial de causar más problemas que la cocaína.

Por su parte, uno de los expositores en la conferencia, el fiscal panameño Julio Villarreal, señaló que cualquier sitio de las ciudades puede convertirse en un laboratorio y centro de distribución de drogas sintéticas

Los participantes en el encuentro también evaluaron estrategias de respuesta y medidas adicionales necesarias para enfrentar esta problemática.

mem/ga