El evento, celebrado en la ciudad nororiental de Hasakeh y organizado por la milicia kurdo-árabe Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), reunió a representantes de distintos sectores, quienes abogaron por una constitución democrática que garantice la participación efectiva de todos los componentes y fortalezca la unidad social.
En su declaración final, los participantes pidieron convocar una conferencia nacional integral, iniciar un proceso de justicia transicional que asegure el retorno seguro y digno de las personas desplazadas, y abrir investigaciones transparentes sobre crímenes de lesa humanidad cometidos contra el pueblo sirio, incluidos los registrados este año en la región costera, la provincia de Sweida y contra comunidades cristianas.
El texto destacó que el modelo de autogobierno vigente en el norte y este del país es una experiencia participativa susceptible de desarrollo y que la actual declaración constitucional aprobada por Damasco no responde plenamente a las aspiraciones de libertad y dignidad del pueblo sirio, por lo que requiere revisión para ampliar la representación.
Los delegados coincidieron en que una solución sostenible pasa por una constitución que consagre la diversidad nacional, cultural y religiosa y establezca un Estado descentralizado. Asimismo, recalcaron que la reconciliación nacional demanda un proceso basado en la verdad, la rendición de cuentas y la inclusión de todas las fuerzas nacionales y democráticas.
Por primera vez, la conferencia escuchó al líder religioso druso, Hikmat Al-Hijri, y al presidente del Consejo Supremo Islámico Alauita, Ghazal Ghazal, quienes destacaron la unidad de los componentes sirios y su papel en la preservación de la integridad territorial.
arc/fm





