Según la CNN, en base a información de dos funcionarios de Defensa, esta es una drástica demostración de fuerza que proporcionará al presidente Donald Trump una amplia gama de opciones militares en caso de que desee actuar contra los grupos del narcotráfico.
Una de las fuentes dijo que el despliegue del Iwo Jima Amphibious Ready Group (ARG) y de la 22 Unidad Expedicionaria de Marines (MEU) al Comando Sur, que no se dio a conocer anteriormente, forma parte de un reposicionamiento más amplio de los activos militares en su área de responsabilidad, llevado a cabo durante las últimas tres semanas.
También se están asignando al Comando Sur un submarino de ataque de propulsión nuclear, aviones de reconocimiento P8 Poseidon adicionales, varios destructores y un crucero lanzamisiles guiados como parte de la misión, indicaron los funcionarios.
Aunque no reveló su destino, la Marina de Estados Unidos anunció este viernes en su página oficial sobre el despliegue del USS Iwo Jima, la 22 MEU y los otros dos buques del Grupo Anfibio de Respuesta (el USS Fort Lauderdale y el USS San Antonio).
Uno de los funcionarios sin identificar destacó a la cadena de noticias que por el momento el refuerzo militar es en particular una demostración de fuerza, destinada más a enviar un mensaje que a indicar cualquier intención de llevar a cabo ataques precisos contra los cárteles.
Las fuerzas estadounidenses desplegaron destructores en las zonas cercanas a la frontera con México en marzo bajo el paraguas de apoyar la misión de seguridad del Comando Norte y apuntalar la presencia de Estados Unidos en el hemisferio occidental.
Sin embargo, los recursos adicionales que se están trasladando ahora dependerán del Comando Sur y están destinados a apoyarlo durante al menos los próximos meses, expresó una de las fuentes.
El Comando Sur abarca 31 países en América Latina y el Caribe, excluyendo a México, que pertenece al Comando Norte. Su área de acción es de 24.9 millones de kilómetros cuadrados. Además, se encarga de la defensa del Canal de Panamá y la protección de recursos militares de Estados Unidos en la región.
En febrero, poco después de regresar a la Casa Blanca, Trump incluyó al Cártel de Sinaloa de México y al Tren de Aragua, de Venezuela, en su lista unilateral de organizaciones terroristas internacionales. Hace poco también designaron al denominado Cártel de los Soles.
La intensificación de las acciones contra los cárteles es parte de las políticas de Trump para reducir la migración y asegurar la frontera en el sur de Estados Unidos.
El canciller venezolano, Yván Gil, denunció en Caracas que esta fase de combate a los carteles va más allá y que lo que se pretende es desestabilizar a toda América Latina.
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