Según se conoció hoy en esta capital, en el plano político los líderes reunidos renovaron el compromiso de colaborar por la estabilidad en el este de la Republica Democrática del Congo (RDC).
Destacaron asimismo el alineamiento de los procesos de paz de Luanda y Nairobi bajo conducción africana, con apoyo de la Unión Africana y la Comunidad Africana Oriental, en coordinación con la reciente Declaración de Doha y el Acuerdo de Washington de 2025.
También saludaron los avances de Lesoto en su reforma constitucional, lo que permitió retirar al reino de la agenda de crisis del bloque.
La Cumbre, efectuada la víspera en Antananarivo, respaldó igualmente la causa de la autodeterminación del Sahara Occidental, en sintonía con los principios de la ONU y la Unión Africana, y condenó la persistencia de la violencia en Gaza, exigiendo un alto al fuego inmediato, liberación de rehenes e inicio de conversaciones para una paz duradera.
En materia económica, se decidió acelerar la creación del Fondo Regional de Desarrollo, como vehículo independiente para atraer inversiones de largo plazo y respaldar programas de integración.
Se aprobó además una enmienda al Protocolo de Finanzas e Inversiones que fortalece las provisiones contra el blanqueo de dinero.
Además, se encomendó agilizar el desarrollo del corredor económico Norte-Sur y la Estrategia Marítima Regional, herramientas clave para mejorar la conectividad y el comercio intraafricano.
El lema adoptado para esta edición fue “Avanzar en la industrialización, la transformación agrícola y la transición energética para una SADC resiliente”.
En la cita, los mandatarios subrayaron la importancia de innovaciones en agricultura climáticamente inteligente, control reforzado de enfermedades animales transfronterizas y lucha contra el cólera, en línea con la reunión continental sobre esta epidemia realizada en junio de 2025.
El encuentro estuvo marcado por mensajes de solidaridad y homenajes póstumos a varios líderes regionales recientemente fallecidos, entre ellos Sam Nujoma, primer presidente de Namibia, y Edgar Lungu, expresidente de Zambia.
Igualmente, se rindió tributo a quienes perdieron la vida en la misión de la SADC desplegada en la República Democrática del Congo (SAMIDRC), a cuyo sacrificio se atribuyó la vigencia de los principios de unidad y solidaridad.
Al cerrar los debates, el presidente Rajoelina expresó gratitud por la confianza depositada en Madagascar para liderar este nuevo ciclo del organismo, al que describió como “pilar de integración, desarrollo y paz en África Austral”.
En la cita, los jefes de Estado y Gobierno eligieron al presidente anfitrión, Andry Rajoelina, como nuevo titular rotativo del organismo, sucediendo al mandatario de Zimbabwe, Emmerson Mnangagwa.
El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, asumirá la presidencia entrante en 2026, mientras que el jefe de Estado de Malawi, Lazarus Chakwera, fue designado al frente del Órgano de Política, Defensa y Seguridad.
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