En un comunicado oficial, el Ministerio destacó un reciente informe de la Clasificación Integrada de Fases de la Seguridad Alimentaria (CIF) de Naciones Unidas, que elevó el nivel de inseguridad alimentaria en Gaza a la Fase 5, la más grave dentro de su escala.

Esta calificación refleja condiciones equivalentes a hambruna y riesgo extremo de desnutrición para la población, estimada en más de dos millones de personas, indicó el texto.

A su vez, el portavoz del Ministerio, Sufyan Qudah, calificó el reporte como un «grave indicador» del empeoramiento de la crisis humanitaria y responsabilizó al bloqueo israelí por crear un ambiente de sufrimiento extremo.

«La persistencia de estas políticas sistemáticas e inhumanas evidencia el uso de la hambruna como un arma contra el pueblo palestino», denunció.

Según datos de Naciones Unidas, más del 80 por ciento de los habitantes de Gaza dependen de la ayuda internacional para su alimentación diaria, mientras que la tasa de pobreza supera el 50 por ciento. Desde el inicio del bloqueo en 2007, la entrada de alimentos, medicinas y suministros básicos ha estado severamente restringida, exacerbando la crisis sanitaria y social.

Qudah instó a la comunidad internacional a actuar de inmediato para presionar a Israel a cesar sus operaciones militares y levantar las restricciones que impiden el acceso a ayuda vital. Asimismo, reclamó la entrega urgente y sostenida de asistencia humanitaria para evitar una catástrofe mayor en la región.

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