Fantasma de Marset en nueva ola de violencia en Bolivia

La Paz, 25 ago (Prensa Latina) El nombre del narcotraficante más buscado de Sudamérica, Sebastián Marset, resurge hoy en Bolivia en medio de la ola de asesinatos y secuestros que provoca pánico en el departamento de Santa Cruz.

La viceministra de Seguridad Ciudadana, Carola Arraya, aseguró que la fuga a mediados de 2023 del jerarca del crimen organizado de origen uruguayo dejó un vacío en el control del narcotráfico, situación aprovechada por organizaciones criminales en el Oriente boliviano, donde las bandas buscan expandirse en un escenario marcado por disputas territoriales.

Explicó la vicetitular que Marset tenía una presencia importante en el narcotráfico regional y que, tras su huida, se produjo un vacío en los negocios ilegales que lideraba.

“Ese vacío es visto como una oportunidad por organizaciones criminales de ingresar a estos espacios”, afirmó, según la cadena Unitel.

La opinión de la viceministra guarda relación con una serie de hechos violentos en menos de un mes.

Resaltan entre ellos el hallazgo de tres cuerpos con signos de tortura, secuestros reportados entre el 26 y el 29 de julio, además del asesinato a balazos en plena vía pública de dos hombres con antecedentes penales el jueves último.

Arraya opinó que todos estos hechos tienen relación directa con el narcotráfico y descartó que se trate de sucesos aislados.

Describió la viceministra la violencia extrema que caracterizó a este último crimen, pues una de las víctimas recibió 50 disparos, y en el escenario de los hechos fueron hallados 100 casquillos de bala, lo que, en su criterio, muestra que se trata de ajustes de cuentas propios de organizaciones criminales.

“¿Por qué tanta violencia? ¿Por qué los ajustes de cuenta? No hay otra explicación”, recalcó.

Alertó la vicetitular acerca de que las fronteras del oriente boliviano son altamente vulnerables.

Señaló al respecto que las organizaciones criminales extranjeras históricamente han buscado asentarse en la región con el objetivo de abaratar los costos de transporte de drogas entre los países productores y los mercados internacionales.

En este escenario, la autoridad gubernamental insistió en que los recientes crímenes deben ser entendidos como parte de una lucha por el control del narcotráfico tras la huida de Marset, cuyo paradero se desconoce.

rc/jpm

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