El primer ministro Ousmane Sonko anunció el fin de semana una remodelación del gabinete, para –según dijo- hacer frente a la deuda, la pobreza y la desconfianza pública.
Entre los cambios está que el ex ministro de Relaciones Exteriores, Yassine Fall ,es ahora ministro de Justicia, y el diplomático Cheikh Niang nuevo canciller al tiempo que Bamba Cisse, ex abogado de Sonko, es el nuevo ministro del Interior.
El gobierno presidido por Bassirou Diomaye Faye había prometido superar las dificultades económicas dejadas por su predecesor, el ex presidente Macky Sall, que dejó el poder luego de violentas protestas de la oposición en 2021.
Entre otros males económicos, el desempleo ronda un 20 por ciento y se considera que más de un tercio de la población vive sumida en la pobreza.
En tanto el gobierno busca aceleradamente financiamiento interna para reducir la deuda de Senegal.
Recientemente, el primer ministro senegalés, Ousmane Sonko, reveló las líneas centrales de un plan de reforma encaminado a reanimar y fortalecer la atribulada economía de su país.
El punto central del esquema es la regulación de los contratos con Senelec, la empresa eléctrica nacional, para combatir el extendido fraude tecnológico que priva de ingresos al Estado.
El abanico de medidas, que también apunta a la diáspora senegalesa, residente sobre todo en Francia, incluye asimismo impuestos a las apuestas online, los cigarrillos y el aumento del límite de edad para la importación de vehículos.
Otro de los sectores alcanzados por las reformas es Internet ya que el plan insta al Ministerio de Comunicaciones a introducir tasas para los servicios audiovisuales, los anuncios y las apuestas digitales.
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