Es la tercera ocasión durante su mandato (concluirá en enero de 2026) que la primera mujer mandataria en este país centroamericano viaja al pequeño estado enclavado en Roma, capital de Italia, tras la audiencia mantenida con el papa Francisco, en octubre de 2022, y asistir a su funeral en abril último.
Entre otras razones, este encuentro con Robert Francis Prevost, santo padre estadounidense y peruano, se realiza porque la presidenta no pudo asistir a la ceremonia de inicio de su pontificado por razones de agenda.
En un comunicado oficial, la administración de Castro afirmó que este acercamiento con el Vaticano es visto como un gesto de alto valor diplomático.
“No solo estrecha la relación con la Santa Sede, sino que también proyecta el compromiso del Gobierno hondureño de trabajar por los valores universales de solidaridad, fraternidad y respeto mutuo”, subrayó la nota de prensa.
La primera reunión de dignataria con el papa León XIV se celebrará en el palacio apostólico, donde la máxima autoridad de la Iglesia católica recibe a los jefes de Estado y de Gobierno.
“Será un saludo protocolario al nuevo papa, un gesto para estrechar las relaciones entre Estados y, también, una forma de despedida institucional de la presidenta en su último semestre de gobierno”, expresó la embajadora designada de Honduras ante la Santa Sede, Gilliam Gómez.
En declaraciones a varios medios de comunicación hondureños que viajaron a Roma para cubrir la visita, Gómez aseguró que los vínculos diplomáticos entre Tegucigalpa y el Vaticano se mantienen en un nivel óptimo.
Tras la audiencia privada con su Santidad, la mandataria se reunirá con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin.
otf/edu





