En el encuentro las partes acordaron fortalecer las relaciones entre ambos países, identificando puntos de interés mutuo como la conservación del medio ambiente y el sector logístico.

Durante las pláticas, Mulino instó a su homóloga a adherirse al Tratado de Neutralidad (1977) y funcionamiento del Canal, como la fórmula para darle seguridad a esta ruta interoceánica que facilita el comercio internacional de manera abierta.

En ese sentido, los mandatarios precisaron los enlaces diplomáticos que se iniciarán para los acercamientos y que las autoridades de Liubliana firmen el importante documento.

Mulino y Pirc Musar también resaltaron que tanto Panamá como Eslovenia han tenido muchos puntos de convergencia en su participación como Estado no permanente en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, sobre todo en la búsqueda de soluciones reales a los conflictos en Ucrania y Gaza.

Además el dignatario panameño resaltó que su país ha tenido importantes avances en favor del combate contra la pesca ilegal No Declarada y No Reglamentada.

El jefe del Estado istmeño invitó a Pirc Musar a asistir al II Foro Económico de América Latina respaldado por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), que se realizará en Panamá, en enero de 2026.

Además convocó a las empresas eslovenas a participar de la Exposición Internacional de Comercio, del 10 al 12 de marzo del próximo año.

En la jornada, también Mulino intercambió con el presidente de Ucrania, Vladimir Zelensky, a quien exhortó a que esa nación europea se adhiera al Tratado de Neutralidad de la vía interoceánica.

El Canal de Panamá, dijo Mulino en su discurso en el plenario del organismo universal, sirve a más de 180 rutas marítimas y más de 140 naciones, y por ella transita, aproximadamente, el cuatro por ciento del comercio mundial.

«Ante esta Asamblea, Panamá reafirma, una vez más, su serio y sostenido compromiso hacia el régimen establecido en el Tratado concerniente a la Neutralidad permanente, y a cuyo protocolo se han adherido numerosos Estados», remarcó.

Para Mulino, según expresó, la neutralidad es la fórmula más adecuada para proteger la seguridad de una ruta abierta al mundo y facilitadora de un comercio internacional más integrado, la cual es y seguirá siendo panameña.

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