A través de su cuenta en Telegram, el mandatario calificó al político de “nuestro muchacho mártir” y elogió era “un joven luchador, un destacado líder político de la generación de oro, forjado en la visión, el pensamiento y la moral” del comandante Hugo Chávez.
Ponderó que su inteligencia, valor y la claridad de ideas lo hicieron “un ser extraordinario, un hombre de estudio y disciplina que trazó un camino, dejando un modelo a seguir para todos”.
Maduro expresó que “el vil asesinato de Robert y María fue un ataque directo del fascismo contra la fuerza de la juventud de la Patria”, al creer que acabar con su vida, podrían silenciarlo, pero se equivocaron.
Su sacrificio es un recordatorio de que la violencia no ha podido ni podrá con la Revolución bolivariana, aseguró.
Afirmó que Robert nos interpela desde el futuro, y “su ejemplo nos demuestra que los valores de patriotismo, moral y compromiso son la única forma de vencer a quienes pretenden dañar a nuestro pueblo”.
Para Cilia (Flores) y para mí, él era como un hijo, y el mayor legado que nos dejó “es su llamado a la juventud a seguir su ejemplo”.
Por eso, dijo Maduro, hoy cada joven de la patria lleva el cuaderno de Robert para anotar sus ideas, sus planes y sus fortalezas.
“Sigamos su senda de estudio, disciplina y compromiso. A once años de su siembra, decimos con la misma fuerza de su espíritu que el futuro nos pertenece. ¡Robert Serra vive en la conciencia del pueblo venezolano!, enfatizó. El 1 de octubre de 2014 un grupo de hombres armados asaltó la vivienda del líder socialista y pusieron fin a su vida con tan solo 27 años y a la de su esposa, un crimen que se presume fue financiado por el exmandatario colombiano Álvaro Uribe y cuyo autor material resultó Leiver Padilla, alias El Colombia.
ro/jcd





