Otro femicidio que conmociona a Argentina

Buenos Aires, 8 oct (Prensa Latina) La joven de 22 años Daiana Magalí Mendieta fue hallada sin vida en un aljibe en Gobernador Mansilla, Entre Ríos, una tragedia que eleva hoy la cifra femicidios en Argentina a 179 en 2025.

Tras permanecer desaparecida desde el pasado viernes, la encontraron con un tiro en la cabeza en un pozo a 10 metros de profundidad. Su caso conmociona a la provincia y al país, y se enmarca en un patrón más amplio de violencia de género.

El Observatorio Ahora Que Sí Nos Ven precisó que la cifra de femicidios en Argentina del 1 de enero al 29 de septiembre de 2025, elaboradas a partir del análisis de medios de comunicación de todo el país, se eleva a 178, un promedio de uno cada 36 horas, así como se registraron 287 intentos.

Las autoridades detuvieron a un hombre de 55 años que mantenía un presunto vínculo con Mendieta y vivía a solo un kilómetro de la víctima.

Según informó el jefe de Policía del Departamento de Tala, el detenido Pedro Silva -que se lo conoce bajo el alias de “Pino”- habría estado en contacto con la joven poco antes de su desaparición.

Especialistas en violencia de género, citados por el diario Hoy, señalan que detrás de cada estadística hay fallas estructurales en la prevención y la protección de mujeres en riesgo.

La reciente serie de informes sobre violencia de género muestra que, a pesar de los avances legales, muchas víctimas no reciben asistencia a tiempo, y los protocolos judiciales y policiales a veces no se aplican de manera efectiva, amplió el periódico cordobés.

El 16 por ciento de las víctimas de femicidio en 2025 realizó una denuncia previa, según datos de centros de atención. Esto evidencia que la denuncia es fundamental, pero que la existencia de una denuncia no es, por sí misma, una garantía de vida.

Esto exige coordinación entre las fuerzas policiales, la justicia y las áreas sociales para un monitoreo real y efectivo de las medidas de protección, recomendaron los expertos mencionados por Hoy.

Organizaciones de derechos humanos llaman a reforzar la educación en igualdad de género, mejorar la respuesta institucional y promover políticas públicas que reduzcan la vulnerabilidad de mujeres y niñas. En este contexto, el caso de Daiana reabre la discusión sobre cómo la sociedad y las instituciones pueden prevenir hechos similares.

kmg/mh

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