De acuerdo con las autoridades locales, el hecho ocurrió en la estación de Marjana, cerca de la aldea de Bali, cuando el vehículo se dirigía desde la capital hacia Sweida. Los atacantes abrieron fuego contra el autobús, causando la muerte de dos civiles e hiriendo a varios más.

La Gobernación confirmó el suceso a través de sus redes oficiales y lo calificó como “ataque perpetrado por un grupo ilegal”. Asimismo, indicó que las autoridades competentes se mantienen en estado de alerta y llevan a cabo investigaciones para identificar y capturar a los responsables.

El comandante de Seguridad Interna de la provincia, Hussam al-Tahhan, declaró a la agencia SANA que el atentado constituye “un acto terrorista cobarde” dirigido a sembrar el miedo entre la población y desestabilizar la seguridad en la región.

Añadió que el crimen ocurre apenas dos días después de ataques similares contra civiles y patrullas de seguridad en zonas rurales de Sweida, atribuidos a bandas ilegales.

Estos intentos desesperados buscan perturbar la estabilidad y aterrorizar a los ciudadanos, pero no impedirán que las fuerzas de seguridad cumplan con su deber. Las investigaciones continuarán hasta dar con los autores y poner fin a estas agresiones, subrayó al-Tahhan.

La carretera Damasco-Sweida, vital para el transporte de pasajeros y bienes entre la capital y el sur del país, había reanudado su tráfico normal en los últimos meses tras completarse las operaciones de aseguramiento anunciadas por el Ministerio del Interior en agosto pasado.

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