En un mensaje publicado en sus redes sociales, el jugador reconoció su error y explicó que su temperamento competitivo a veces lo traiciona. “A veces la pasión me gana por querer siempre vencer y ayudar a mi equipo”, escribió como justificación de su actitud, que incluyó gestos de disgusto al dejar el campo.

   Vinicius afirmó que ya había pedido disculpas en persona a sus compañeros, al cuerpo técnico y al presidente del club durante el entrenamiento matutino en Valdebebas. Cerró su comunicado con una declaración de fidelidad al conjunto blanco: “Prometo seguir luchando cada segundo por el bien del Real Madrid, como lo he hecho desde el primer día”.

   Por su parte, el técnico Xabi Alonso, que evitó polemizar tras la victoria ante el Barcelona, había anticipado que trataría el asunto internamente. “No quiero perder el foco de lo importante, pero son cosas que hablaremos”, señaló el entrenador.

   Queda por ver si la disculpa pública y privada del brasileño bastará para cerrar el episodio o si su desplante tendrá consecuencias en los próximos partidos del Real Madrid.

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