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La presidenta del Consejo de Defensa Provincial de Santiago de Cuba, Beatriz Johnson, describió una “noche muy larga” y una madrugada en la que, “a las 7:00 de la mañana, aún era muy oscuro y llovía a cántaros”.
Este territorio registró derrumbes parciales y totales de viviendas en los municipios de Palma Soriano, San Luis, Guamá y Santiago de Cuba, caída de árboles y postes eléctricos, interrupciones en las comunicaciones, y pérdidas en cultivos de café y yuca.
Johnson destacó, además, gestos de solidaridad popular: “En El Cobre, 17 personas quedaron atrapadas por la crecida de un río, y un joven médico abrió las puertas de su hogar a familias, incluidos niños y ancianos”.
En Granma, la presidenta del Consejo de Defensa Provincial, Yudelkis Ortiz, informó que alrededor de 126 mil personas fueron evacuadas preventivamente ante la crecida de ríos.
De manera preliminar, se reportan caídas de árboles, cables y postes eléctricos, daños en techos y afectaciones en las comunicaciones.
Por su parte, el presidente del Consejo de Defensa Provincial de Holguín, Joel Queipo, precisó que más de 200 mil personas fueron protegidas en la provincia.
Aunque aún no se dispone de un balance definitivo, las afectaciones se estiman considerables: techos de almacenes dañados, empresas con impactos parciales, viviendas inundadas y hospitales con afectaciones, además de otros centros de salud.
Queipo subrayó que en apenas ocho horas cayeron 109 millones de metros cúbicos de agua, “un récord inédito” para la región.
En Guantánamo, su homólogo Joel Pérez confirmó que no se lamentan pérdidas humanas y que los principales daños se concentran en la agricultura, especialmente en la cosecha cafetalera, y en viviendas.
El centro del huracán Melissa abandonó la mañana del miércoles el oriente cubano y se dirige ahora hacia el sudeste de Las Bahamas.
Las autoridades mantienen la alerta ante afectaciones meteorológicas y continúan movilizando recursos para la recuperación integral de los territorios afectados.
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