El convenio fue suscrito en Manila por el secretario de Defensa filipino, Gilberto Teodoro Junior; y su homólogo canadiense, David McGuinty.
Este establece un marco legal para la presencia de tropas extranjeras con armamento y para la ejecución de maniobras militares a gran escala en ambos territorios.
Teodoro subrayó que el convenio busca respaldar un orden internacional basado en reglas y ofrecer mecanismos de cooperación que fortalezcan la seguridad regional.
Agregó que los ahorros y beneficios obtenidos se destinarán a mejorar la capacidad de las fuerzas armadas filipinas y a garantizar la protección de los ciudadanos.
El documento representa el tercer memorando de defensa firmado por la administración del presidente Ferdinand Marcos Junior, después de similares acuerdos con Japón y Nueva Zelanda.
A su vez, refleja la intención de Manila de ampliar la cooperación internacional en materia de seguridad, intercambio de tecnología y datos para operaciones marítimas y vigilancia.
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