En una misiva, a nombre también de autoridades de la cartera y del embajador Nazario Fernández, la doctora recordó la epopeya protagonizada en 1998 por 19 profesionales de la salud muy jóvenes.

Llamó a cada miembro de la Brigada digno representante del internacionalismo, la ética, el infinito amor y el respeto a la vida, valores inculcados por la Revolución y su líder histórico Fidel Castro.

Precisó que llegaron para contribuir al enfrentamiento de los daños del huracán Mitch y unos meses después, en abril de 1999, fueron jóvenes centroamericanos a estudiar a la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), en La Habana.

En el 2005, egresaron 188 médicos guatemaltecos y hasta la fecha un total de mil 117, de ellos 485 continuaron la actividad postgraduada, 448 como especialistas en Medicina General Integral y en otras 37, describió Cutiño.

Ese propio año, añadió, se incorporó Guatemala al Programa Operación Milagro, el que benefició y representa una luz de esperanza para los pacientes, familias y comunidades más necesitadas.

En octubre de 2005, ante la emergencia por la tormenta tropical Stan, Cuba reforzó la Brigada con el Contingente «Henrry Reeve» y nuestros profesionales una vez más desarrollaron un arduo trabajo en apoyo a las comunidades más afectadas, amplió en el texto.

El 5 de agosto de 2013 arribaron las primeras 24 enfermeras como parte del proyecto «Fortalecimiento del Primer Nivel de Atención», el cual completó en noviembre de ese año las 146, expuso.

La BMC participó en la emergencia por la erupción del volcán de fuego el 3 de junio de 2018, uno de los eventos más devastadores en la historia reciente de Guatemala, remarcó.

En los años 2020, 2021, 2022 asumió posiciones importantes en el enfrentamiento a la epidemia de la Covid-19, destacó.

Consideró que ello es solo un resumen del trabajo, el cual pone en alto el respeto a la vida, amor al prójimo, ética y los valores de la salud pública cubana, inculcados por Fidel Castro.

Aseguró que actualmente el esfuerzo se multiplica en defensa de la vida en los lugares más recónditos de esta geografía, a pesar de las campañas despeadas que intentan desacreditar a la Revolución y a la Cooperación Médica.

Nada podrá cambiar los miles de pacientes atendidos, las vidas salvadas, la visión recuperada, el nacimiento de un niño, el alivio del dolor, la mirada del enfermo que por primera vez le ponen en el pecho un estetoscopio, afirmó.

La jefa de la BMC calificó de pena que el enemigo brutal (Estados Unidos) no entienda de solidaridad y humanismo.

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