En un comunicado oficial, el Ministerio de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica desmintió enérgicamente las afirmaciones publicadas por Trump en su plataforma Truth Social, en las cuales caracterizan a los afrikáners como un grupo minoritario blanco perseguido.

La declaración subraya que dicha caracterización es “contraria a la historia” y que la presunta persecución “no está sustentada por hecho alguno”.

El gobierno sudafricano reafirmó así su postura consistente ante representaciones erróneas de las relaciones raciales y la criminalidad agraria en el país.

La réplica oficial incluyó la referencia a cuatro declaraciones previas emitidas para rectificar narrativas similares, dirigidas incluso a programas especiales de refugiados y comunicaciones oficiales de Estados Unidos, que abordan con datos el tema de los derechos humanos y los crímenes en zonas rurales.

Frente a estas imprecisiones, Sudáfrica enfatizó en que su prioridad nacional e internacional continúa siendo la construcción de la unidad social y la promoción de la cohesión.

La Cancillería destacó su propia transición de un pasado de división racial a una democracia constitucional como un ejemplo global de reconciliación e inclusión.

“En este contexto, Sudáfrica centra sus esfuerzos en sus contribuciones positivas a la escena global. Nuestra experiencia nos posiciona de manera única para abogar en el G20 por un futuro de solidaridad genuina, donde la prosperidad compartida sobrepase las profundas desigualdades”, agregó el texto.

La postura del ejecutivo sudafricano reafirma su compromiso con los hechos, al tiempo que anticipa la exitosa realización de la próxima Cumbre de Líderes del G20 que Pretoria albergará a fines de este noviembre, a la cual Trump anunció que no asistiría.

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